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predicas cristianas | Esclarecimiento de una historia del rey Salomón: la senda para discernir al verdadero Cristo de los falsos (I)

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predicas cristianasEsclarecimiento de una historia del rey Salomón: la senda para discernir al verdadero Cristo de los falsos (I)



Durante mi tiempo libre, leí una historia sobre Salomón en internet. El rey de un país vecino dio a este como un regalo dos cestas de flores únicas y raras. Las flores de una de las cestas eran reales y las de la otra eran falsas. Sin embargo, todas ellas eran extremadamente parecidas. Casi no había manera de distinguir las flores reales de las falsas solamente mirando su aspecto. El funcionario público del país vecino que entregó las cestas de flores había oído de la sabiduría de Salomón. Por tanto, pidió a este que distinguiera entre las flores reales y las falsas. Salomón envió a algunas personas para que llevaran las dos cestas de flores a su jardín. Nadie entendía cuáles eran sus intenciones. Salomón pidió a todos que se reunieran en el jardín y allí entendieron por qué había llevado las dos cestas al mismo. Las flores reales habían atraído muchas abejas mientras que las falsas no tenían ninguna.

Aunque esta historia es muy simple, contiene mucho significado espiritual. Las flores que tenían vida en ellas desprendían una fragancia y secretaban néctar. Por eso atraían a las abejas. Las flores de la otra cesta estaban muertas. Aunque, por fuera, parecían iguales, no desprendían una fragancia ni tenían miel con la que atraer a las abejas.
Después de leer esta historia de cómo Salomón pudo distinguir las flores reales de las falsas, no pude evitar pensar que actualmente existen muchos cristianos que esperan devotamente el regreso del Señor Jesús. Sin embargo, al mismo tiempo, tienen miedo de ser engañados y como consecuencia, rechazan el evangelio del regreso del Señor Jesús. Porque en la Biblia, el Señor Jesús dijo: “Entonces si alguno os dice: ‘Mirad, aquí está el Cristo’, o ‘Allí está’, no le creáis. Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas, y mostrarán grandes señales y prodigios, para así engañar, de ser posible, aun a los escogidos” (Mateo 24:23-24). Esa es la razón por la que actualmente existen muchos cristianos en el mundo religioso que, aunque hayan oído a alguien dar testimonio de Dios y decirles que Dios ha vuelto, no buscan ni investigan, ni disciernen. En su lugar, juzgan, condenan y se resisten ciegamente. Ellos mantienen que “todos los que dan testimonio del regreso del Señor son falsos”. ¿Pueden ellos dar la bienvenida al regreso del Señor si tienen esta clase de noción e imaginación? Si meditamos detenidamente en las enseñanzas del Señor, veremos que Él nos ha enseñado realmente cómo discernir a los falsos Cristos para que no rechacemos el evangelio del regreso de Dios únicamente por la manifestación de falsos Cristos en los últimos días. Si permitimos que nuestro temor de ser engañados por falsos Cristos nos impida centrarnos en escuchar y discernir la voz de Dios, ¿cómo podemos dar la bienvenida al regreso del Señor? Recuerda cuando el Señor Jesús acababa de llegar para llevar a cabo Su obra. Los fariseos, principales sacerdotes y escribas que servían a Jehová Dios en el templo se ciñeron a sus propias nociones e imaginaciones y a la Biblia del Antiguo Testamento. Ellos no buscaron ni investigaron la obra del Señor Jesús. En su lugar, clavaron al Señor Jesús en la cruz y cometieron un pecado muy grave. Al final, recibieron el castigo y la maldición de Dios. Sin embargo, Pedro, Natanael, la mujer samaritana y otros, después de escuchar las palabras del Señor Jesús, reconocieron que el Señor Jesús era el Mesías que había de venir. Como consecuencia, siguieron al Señor. Se profetiza muchas veces en Apocalipsis que “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias”. En el libro de Romanos, capítulo 10, versículo 17, se dice: “Así que la fe viene del oír, y el oír, por la palabra de Cristo”. Por tanto, cuando oigamos a alguien difundir el evangelio del regreso del Señor Jesús, primero debemos buscar e investigar. A partir de nuestra búsqueda e investigación, debemos discernir después si el Señor ha regresado o no. De esta forma, no perderemos la oportunidad de encontrarnos de nuevo con el Señor.
Naturalmente, si hemos de dar la bienvenida al regreso del Señor, primero debemos entender qué es Cristo. Echemos un vistazo a las palabras de Dios y veamos qué tiene que decir Él sobre este tema: “El Dios que se hizo carne se llama Cristo, y así el Cristo que les puede dar a las personas la verdad se llama Dios. No hay nada excesivo en esto” (‘Sólo el Cristo de los últimos días le puede dar al hombre el camino de la vida eterna’ en “La Palabra manifestada en carne”). A partir de las palabras de Dios podemos ver que sólo el Dios encarnado puede ser llamado Cristo. Cristo es que el Espíritu de Dios se ha materializado en la carne. Cristo es la aparición de Dios, y es Dios hecho carne para llevar a cabo Su propia obra. Aunque, por fuera, Cristo parezca una persona normal, Su esencia es divinidad y la obra que lleva a cabo es la obra de Dios. Ahora bien, ¿cómo se puede discernir entre el Cristo real y los falsos Cristos? Dios dijo: “Para investigar si es la carne encarnada de Dios, el hombre debe determinarlo a partir del carácter que Él expresa y de las palabras que Él habla. Es decir, si es o no la carne encarnada de Dios, y si es o no el camino verdadero, debe discernirse a partir de Su esencia. Y así, para determinar[a] si es o no la carne de Dios encarnado, la clave está en prestar atención a Su esencia (Su obra, Sus palabras, Su carácter, y mucho más), en lugar de fijarse en Su apariencia exterior. Si el hombre sólo ve Su apariencia exterior, y pasa por alto Su esencia, demostrará la ignorancia y la ingenuidad del hombre” (‘Prefacio’ en “La Palabra manifestada en carne”). “Si un hombre se llama a sí mismo Dios, pero no es capaz de expresar el ser de la divinidad, ni hacer la obra de Dios mismo, ni representar a Dios, sin duda no es Dios, porque no tiene la esencia de Dios, y lo que Dios puede por Su naturaleza lograr no existe dentro de él” (“La diferencia entre el ministerio del Dios encarnado y el deber del hombre”). A partir de las palabras de Dios Todopoderoso, podemos entender que discernir a los falsos Cristos implica inspeccionar si estos poseen la esencia de Dios y no hacerlo examinando su aspecto externo. También debemos examinar su obra, palabras y carácter con el fin de discernir. Cristo puede proveer a las personas de la verdad y la vida. Él puede expresar el carácter justo de Dios y la sabiduría de Su obra. Cristo es el Dios mismo santo y justo. Esto es parecido a que el Señor Jesús, durante la Era de la Gracia, tenía el aspecto de una persona normal. Sin embargo, Él expresó mucha verdad y proveyó a las personas del camino del arrepentimiento. También expresó un carácter que es principalmente misericordia y amor y enseñó a las personas a perdonar a los demás setenta veces siete. El Señor Jesús también sanó a los enfermos, exorcizó demonios y liberó a personas de las ataduras de la ley. Al final, fue clavado en la cruz, completando de esta forma la redención de toda la humanidad. A partir de las palabras y obra del Señor Jesús, podemos confirmar completamente que Cristo es la verdad, el camino y la vida. De forma similar, hoy el Señor Jesús que ha regresado a la carne —Dios Todopoderoso— ha traído una nueva era, la Era del Reino. Él ha expresado millones de palabras y ha venido para llevar a cabo la obra de juicio de los últimos días. Él juzga y purifica al hombre con Su carácter justo y santo de forma que este ya no necesita vivir en un ciclo interminable de cometer pecados y arrepentirse. Su obra permitirá al hombre, al final, liberarse de las ataduras de los pecados y ser salvado y perfeccionado totalmente. Las palabras de DiosTodopoderoso nos han revelado todos los misterios. Nos han informado de las intenciones de Dios para la humanidad, del final para cada categoría de hombre así como de la obra que Dios pretende cumplir. Las palabras de Dios nos han dado también una senda de práctica. A partir de las palabras y obra de Dios Todopoderoso, podemos ver que Él es la personificación de la verdad. La obra de Dios Todopoderoso confirma una vez más que Cristo es la verdad, el camino y la vida. Los falsos Cristos nunca podrán lograr ninguna de estas cosas.

Scripture quotations taken from www.LBLA.com . Copyright by The Lockman Foundation.
Continuará…
Parte Dos: Esclarecimiento de una historia del rey Salomón: la senda para discernir al verdadero Cristo de los falsos (II)
Recomendación: devocionales cristianos 
                           La Segunda venida de Cristo

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