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Película cristiana en español "El último tren" Escena 2 - ¿Por qué Dios se hace carne para realizar Su obra en los últimos días?




Película cristiana en español "El último tren" Escena 2 - ¿Por qué Dios se hace carne para realizar Su obra en los últimos días?

La Iglesia de Dios Todopoderoso da testimonio de que, en los últimos días, el Señor ha regresado en la carne para expresar la verdad y llevar a cabo Su obra del juicio, que comienza por la casa de Dios. Entonces, ¿por qué Dios tiene que hacerse carne para llevar a cabo Su obra del juicio en los últimos días? ¿No puede realizar esta obra el Espíritu de Dios? ¿Qué diferencia hay entre la obra de Dios encarnado y la obra del Espíritu?

La palabra de Dios Todopoderoso dice :

"La obra del Espíritu está envuelta en misterio; es difícil que los seres mortales la desentrañen y aún más difícil que la vean, y por eso sólo pueden confiar en imaginaciones huecas. La obra de la carne, sin embargo, es normal y se basa en la realidad, y posee una rica sabiduría y es un hecho que el ojo físico del hombre puede contemplar; el hombre puede experimentar de forma personal la sabiduría de la obra de Dios y no tiene necesidad de emplear su profusa imaginación. Esta es la exactitud y valor real de la obra de Dios en la carne. El Espíritu sólo puede hacer cosas que son invisibles para el hombre y difíciles para que él se las imagine, por ejemplo, el esclarecimiento del Espíritu, el toque del Espíritu y la guía del Espíritu, pero para el hombre que es capaz de pensar, esto no le aporta ningún significado claro. Sólo le proporcionan un toque o un significado amplio, pero no le pueden dar una instrucción con palabras. La obra de Dios en la carne, sin embargo, es muy diferente: tiene una orientación exacta de las palabras, tiene una voluntad clara y tiene objetivos claros que se requieren. Y así el hombre no tiene que dar palos de ciego o emplear su imaginación, mucho menos hacer conjeturas. Esta es la claridad de la obra en la carne y su gran diferencia de la obra del Espíritu. La obra del Espíritu sólo es adecuada para una esfera limitada y no puede reemplazar la obra de la carne. La obra de la carne le da al hombre metas mucho más exactas y necesarias y un conocimiento mucho más real y valioso que la obra del Espíritu."

de ‘La humanidad corrupta necesita más que nadie la salvación del Dios encarnado’ en “La Palabra manifestada en carne

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