Para mantener una relación normal entre Dios y nosotros, tenemos que acercarnos a Él a menudo. Entonces, ¿cómo? Por favor lee...
¿Cómo hacer devoción espiritual para acercarse más a Dios?
Las palabras de Dios dice: “Cuanto más vivas una vida espiritual, más ocupado estará tu corazón por las palabras de Dios, siempre preocupado por estos asuntos y siempre llevando esta carga. Después de eso, puedes revelar tu verdad más interna a Dios a través de tu vida espiritual, decirle lo que quieres hacer, lo que has estado pensando, tu entendimiento de la palabra de Dios y tus propios puntos de vista acerca de ella. ¡No escondas nada; ni siquiera un poco! Practica el comunicarle las palabras de tu corazón a Dios, decirle la verdad, y no dudar en expresar lo que hay en tu corazón. Cuanto más hagas esto, más sentirás el encanto de Dios, y tu corazón se verá cada vez más atraído hacia Dios. Cuando esto acontezca, sentirás que Dios es más querido para ti que cualquier otra persona. Pase lo que pase, nunca te apartarás de Su lado. Si practicas esta clase de devocional espiritual a diario y no lo sacas de tu mente, sino que lo tratas como tu llamamiento en la vida, la palabra de Dios ocupará tu corazón. Esto es lo que significa ser tocado por el Espíritu Santo. Será como si Dios hubiera poseído siempre tu corazón, como si siempre hubiera habido amor en tu corazón. Nadie puede quitarte esto. Cuando esto ocurra, Dios vivirá realmente en ti, y tendrá un lugar en tu corazón” ("La Palabra manifestada en carne").
De las palabras de Dios podemos ver que la verdadera vida de la devoción espiritual se manifiesta a través de calmar nuestro corazón ante Dios para leer y meditar Sus palabras de con sinceridad, diciéndole nuestro verdadero estado y contándole sin reservas nuestra deficiencia. Con que a menudo tengamos tal vida de la devoción espiritual, podremos entender más y más la voluntad de Dios y Sus requisitos hacia nosotros, y desde luego, conocemos más y más a Dios, tendremos la sensación inexpresable de que Dios es demasiado amoroso, y de modo que nuestros corazones se presentarán con frecuencia ante Él, ¡y nuestra relación con Dios sea cada vez más cercana!
Comentarios
Publicar un comentario